Visita a Madrid
Como ya os he adelantado en mi cuenta de instagram, este pasado puente he realizado una pequeña visita a Madrid con mi hermano, compañía inmejorable. Llevábamos días pensando en ir pero yo por exámenes y él por trabajo, no nos decidíamos, pero de locuras se vive y para allá que fuimos. Nuestra estancia duró sólo un día pero fue un no parar constante.
Salimos de Murcia tarde y por eso no pudimos aprovechar la primera noche ya que llegamos tarde y cansados por el viaje en coche. Pero al día siguiente nada nos podía parar. Nuestra estancia tuvo lugar en casa de unos amigos en la calle Fuencarral, conocida por las tiendas que hay en ella. Nada más salir estábamos casi en la Gran Vía por lo que la recorrimos hasta llegar al Retiro, donde disfrutamos de la tranquilidad que se respira en este gran parque. Ya había estado en él una vez pero quería ver el palacio de cristal que no pude verlo en mi anterior visita. Nos dirijimos a comer en el paseo de la Castellana en un local llamado Lateral, super recomendable, precios económicos y todo riquísimo, para chuparse los dedos. Volvimos a la Gran Vía a hacer unas compras y enseguida a prepararnos para disfrutar del partido de Champions en el Santiago Bernabeu.
Durante el camino en el metro hacia este lugar, he de reconocer que pasé un poquito de miedo al ver a los alemanes del otro equipo, con cerveza en mano y cantando como si no hubiera mañana. Llegamos al estadio donde ya había muchisima gente y hubo algo que me llamó la atención y que no sabía hasta el momento, la gente suele hacer botellón en una calle paralela antes del partido. Recibimos al autobús a su llegada, lo cual me esperaba que fuera algo mejor, ya que pasó rápido y no pude ver a nadie del equipo. Al entrar al estadio y ver el campo sentí que todos los pelos de mi cuerpo estaban de punta, fue impresionante. Pero esto fue a más cuando sonó el himno del Real Madrid y el de la Champions. Sin duda, fue una experiencia inolvidable, la cual no sé si volveré a repetirla alguna vez, pero creo que todo el mundo debería de disfrutar uno de estos partidos alguna vez en sus vidas. Yo no soy muy fanática del futbol y sin embargo, disfruté como un aficionado más.
Y finalmente mi visita a Madrid acabó esa noche... fue bonito mientras duró.